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La revolucionaria tableta de Google, Nexus 7, de cuya fabricación se ha encargado el gigante taiwanés Asus, ha presentado en algunas unidades una visualización irregular en la pantalla, que ha provocado la alerta instantánea entre los usuarios de este esperado dispositivo, sembrando la desconfianza entre los candidatos a ser futuros propietarios de un Nexus 7.

El titular ha hecho saltar todas las alarmas: la pantalla del nuevo Nexus 7, una de las apuestas más ambiciosas de Google para asaltar el mercado que mantenían cautivo las tabletas Kindle de Amazon, presenta graves problemas de ghosting.

¿Qué es el ghosting o efecto fantasma?

El screen tearing o ghosting es un efecto óptico que se daba en algunas pantallas TFT y consiste en la aparición de un halo o rastro de un objeto en movimiento. Técnicamente se trata de un rastro de píxeles provocado por culpa de un refresco de pantalla lento, que hace que el movimiento de objetos o el cambio de contraste o tonalidad quede deformado. El máximo exponente de este efecto/defecto se daba en las primeras consolas PSP cuando, al ejecutar algunos juegos de mucha acción, por culpa de un refresco lento, los personajes y objetos dejaban un rastro o estela que no da tiempo a limpiar hasta el siguiente refresco de pantalla, produciendo una especia de sombra o mancha difuminada que persigue a todo lo que se mueve.

Usuarios inquietos

Todo parece apuntar a que este fenómeno solo se ha dado en una serie (o mejor pre serie) de las primeras Nexus 7 comercializadas durante la celebración del congreso de desarrolladores Google I/O celebrado la última semana de junio de 2012 en San Francisco. Asus ha salido al paso de las acusaciones confirmando que “este problema se ha podido presentar en algunas unidades expuestas en el congreso Google I/O, que eran tabletas de pre serie, pero se ha corregido en los lotes de fabricación posterior”.

El ghosting que se ha visto en el Nexus 7, más que afectar a las imágenes en movimiento, se ha hecho patente cuando se cambiaba de un fondo luminoso a otro muy oscuro de gran densidad, tal y como se puede apreciar en las imágenes que mostramos en este artículo, y que, al parecer, desaparece al pasar unos minutos.

Google y Asus han tratado de conseguir costes bajos para la producción del Nexus 7, pero eventualidades como la que ha sucedido con la velocidad de refresco de la pantalla resultan muy embarazosas y difíciles de asimilar por los usuarios. Incluso en algunos foros, desde donde se hace un seguimiento muy puntual de este problema, se preguntan cómo es posible que este efecto, propio de las pantallas TFT, se haya trasladado a una moderna LCD IPS, cuya tecnología es mucho más estable y carente de este tipo de irregularidades.